Sin duda se están notando los efectos de una crisis económica internacional de proporciones, donde el descuido y la irresponsabilidad de especuladores produjó un quiebre financiero de magnitud global (excelente video explicativo en vimeo).
El principal y peor efecto de las crisis económicas es la cesantía. En Chile las cifras entregadas por el INE del último trimestre muestran un desempleo del 8,0%, lo que representa un ascenso de 0,8 puntos porcentuales en 12 meses, esto que equivale a 583.000 personas a nivel nacional. En algunas regiones del país, como la octava, el desempleo ya ha superado las dos cifras.
Más allá de los números, el desempleo es un trauma donde la inseguridad y la tensión afectan el bienestar de quienes lo sufren y sus familias. La evidencia es fuerte al demostrar la asociación entre esta condición con diversas enfermedades físicas y mentales, el abuso de alcohol y drogas , el mayor uso de servicios sanitarios e incluso un aumento en el riesgo de muerte . La relación entre salud y desempleo sin duda es compleja combinándose factores financieros, sociales, psicológicos y biológicos. (The impact of unemployment on health: a review of the evidence, Health and unemployment)
Para disminuir los nocivos efectos del desempleo en la salud se proponen diversas intervenciones siendo las principales a nivel estatal el re-empleo y los subsidios económicos, lamentablemente el impacto de ambas medidas ha demostrado ser insuficiente, dejando claro que el problema no es sólo financiero, sino también psicológico y social. A nivel de los servicios sanitarios se proponen intervenciones con un enfoque preventivo que ayuden a quienes sufren los efectos de la cesantía a mejorar sus estrategias de adaptación al proceso, evitando perder el apoyo de sus redes sociales. Al mismo tiempo recomiendan estar atentos al desarrollo de enfermedades psiquiátricas como trastornos adaptativos, depresión, ansiedad y abuso de alcohol y drogas, sobretodo en las poblaciones de mayor riesgo, los cesantes jóvenes y las mujeres.
¿Estamos atentos al impacto del desempleo en la salud?
El principal y peor efecto de las crisis económicas es la cesantía. En Chile las cifras entregadas por el INE del último trimestre muestran un desempleo del 8,0%, lo que representa un ascenso de 0,8 puntos porcentuales en 12 meses, esto que equivale a 583.000 personas a nivel nacional. En algunas regiones del país, como la octava, el desempleo ya ha superado las dos cifras.
Más allá de los números, el desempleo es un trauma donde la inseguridad y la tensión afectan el bienestar de quienes lo sufren y sus familias. La evidencia es fuerte al demostrar la asociación entre esta condición con diversas enfermedades físicas y mentales, el abuso de alcohol y drogas , el mayor uso de servicios sanitarios e incluso un aumento en el riesgo de muerte . La relación entre salud y desempleo sin duda es compleja combinándose factores financieros, sociales, psicológicos y biológicos. (The impact of unemployment on health: a review of the evidence, Health and unemployment)
Para disminuir los nocivos efectos del desempleo en la salud se proponen diversas intervenciones siendo las principales a nivel estatal el re-empleo y los subsidios económicos, lamentablemente el impacto de ambas medidas ha demostrado ser insuficiente, dejando claro que el problema no es sólo financiero, sino también psicológico y social. A nivel de los servicios sanitarios se proponen intervenciones con un enfoque preventivo que ayuden a quienes sufren los efectos de la cesantía a mejorar sus estrategias de adaptación al proceso, evitando perder el apoyo de sus redes sociales. Al mismo tiempo recomiendan estar atentos al desarrollo de enfermedades psiquiátricas como trastornos adaptativos, depresión, ansiedad y abuso de alcohol y drogas, sobretodo en las poblaciones de mayor riesgo, los cesantes jóvenes y las mujeres.
¿Estamos atentos al impacto del desempleo en la salud?
No hay comentarios:
Publicar un comentario